¿Debate?¿Qué debate?

Pero ¿es que nuestra clase política es incapaz de elevar el tono, debatir sobre el ya secular problema territorial de España, a ver si le damos solución para unos años más (porque definitiva, no creo)? Llevo horas en el Senado, en el falso debate sobre autonomías, y el primero que me decepciona es el presidente del Gobierno; luego, varios de los presidentes que intervienen. O sea, que estamos hablando en los medios de reforma de la Constitución, de federalismos imperfectos y pluscuamperfectos, de autonomías de varias velocidades, de acabar con el mapa de Javier de Burgos…Y en el Senado, que es la Cámara territorial (o lo será, cuando lo reformen, vaya usted a saber cómo, porque ni el presidente ni nadie nos lo dijeron), hablando de trasvases y de qué hay de lo mío. Que eso también, pero, por favor, no sólo. Me parece otra oportunidad perdida para haber hablado de auténtica política. Para esto, casi mejor no haber resucitado este debate, aunque conste que yo soy partidario de verse las caras en cualquier foro., incluído este del Senado, tan dejado de la mano de Dios y de los hombres.

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