Sí, a muchos se nos murieron amigos en Santiago: Enrique Beotas era alguien para mí muy querido. Pero ahora hay que dar paso a una brisa de cierto optimismo, porque no nos pueden ganar las veladuras de la muerte.

¿Pronunciará o no Mariano Rajoy la palabra ‘Bárcenas’ en su comparecencia parlamentaria de este 1 de agosto? Hagan su apuesta, señores, que el juego no es tan frívolo como parece…

La cébere frase ‘¡Es la política, estúpido!’, en España debería ser ‘¡Es la política con ‘p’ minúscula, borregos!. Ahora andan dando vueltas al calendario de la comparecencia parlamentaria de Rajoy, en busca de la menor audiencia y repercusión posibles. Que si el 24 de julio, que si el 31…Manda carallo.

Esto no puede acabar con bien, piensan muchos… http://www.diariocritico.com/opinion-analisis/fernando-jauregui/438771 http://www.diariocritico.com/opinion-analisis/fernando-jauregui/438681

Se te va muriendo, de golpe, demasiada gente conocida. Hoy me ha golpeado, desde El País, la noticia del fallecimiento de Nacho Montejo, abogado, clandestino en los tiempos de la clandestinidad –que a momentos compartimos–. Un pedazo del pasado (y no era mucho mayor que yo, lo que debería ir haciéndome meditar). No sé de […]

Esto, simplemente, no puede seguir así Arde el bosque de la política española por los cuatro costados, mientras los medios de comunicación de medio mundo se ocupan, para mal, de la situación moral –que no económica, en estos momentos—en nuestro país. Y cuando medio partido gobernante parece haber declarado la guerra al otro medio, y […]

———– (Maduro está sobrepasando en impresentabilidad diplomática al mismísimo Chavez) ———– Creo firmemente que también España metió la pata con lo del avión de Evo Morales: hay que ver al señor embajador en Viena invitándose a tomar un café en el aparato presidencial boliviano para comprobar que allí no estaba Snowden. Pero la reacción de […]

Sí, Luis Planas, un hombre con un extenso curriculum tras sí, estuvo a punto de ser director general del Centro Nacional de Inteligencia, puesto que finalmente fua a parar a manos de un militar, Félix Sanz Roldán. Nunca trascendió la noticia, más allá de algunos círculos informados, pero esa es la verdad: los responsables entonces […]